Los Hermanos son una comunidad religiosa católica integrada por hombres consagrados a Dios con la finalidad de llevar el Evangelio al mundo de la educación, atendiendo especialmente a la niñez y juventud menos favorecidos. Fieles a la llamada del Espíritu Santo y al carisma de su Fundador, los Hermanos, siguiendo a Jesucristo, se consagran a Dios para procurar su gloria, ejerciendo “juntos y por asociación” su ministerio apostólico de educación (Regla, 2).
La vocación es siempre
una respuesta personal a la llamada de Dios.
Vivimos nuestra vocación lasallista como religiosos o seglares, hombres o mujeres, célibes o casados, en la diversidad de culturas y contextos que conforman el mapa lasalliano del mundo, ya sea como católicos, cristianos, miembros de otra tradición religiosa u otras creencias, y todos compartimos el mismo compromiso por la dignidad de las personas.